lunes, 24 de septiembre de 2012

La Pelea Final

«Si no podemos poner fin a nuestras diferencias, contribuyamos a que el mundo sea un lugar apto para ellas». John Fitzgerald Kennedy.

Dentro de unos días, estas palabras serán historia. Venezuela ha vivido la más inmensa e intensa campaña política de su historia contemporánea. Son dos pesos pesados en un ring, Ali vs Foreman, en el ultimo round. 

El primero de estos luchadores, el actual presidente Hugo Chavez. Que después de 14 años en el poder aun pide un tercer período. Su proyecto se basa en lo mismo, un líder carismático que ha logrado calar en el colectivo con unas propuestas sociales exitosas. Pero para mi, la mayor fortaleza siempre ha sido su discurso: Es el único -lamentablemente- que se ha acordado de los pobres. Les ha cumplido? No. Pero los ha tomado en cuenta, aun así sea como arma de manipulación. Le ha dado excelentes resultados. 

Con un segundo período cargado de escándalos de corrupción, de justicia "moldeable", aumento de la inseguridad, alta inflación, economía de puerto, control cambiario asfixiante e irrespetos a la propiedad privada, han sido las características mas notables estos años. Pienso que ademas de lo nombrado hay algo que no puedo dejar de mencionar. Todo se ha politizado. Si criticas no estas conmigo, es imposible aconsejar, todos los planes propuestos por la oposición se desechan solo por el hecho de no estar en el partido, o estas conmigo o estas contra mí. Cero dialogo. Así nunca se va a construir un país.


En la otra esquina del ring tenemos a un joven, actual gobernador del Estado Miranda, Henrique Capriles Radonski, que si ponemos a mirar un poco en retrospectiva, se mostraba esquivo cuando le preguntaban sobre sus aspiraciones a la presidencia, e incluso si miramos mas atrás, uno de los defectos de la oposición es que carecía de liderazgo. Habemus Lider.

Y que clase de líder, primero una formula de campaña que en mi parecer es muy exitosa, pero a la vez super extenuante, ha recorrido mas de 200 pueblos, llenando avenidas y causando una sensación en la población que no tiene nada que envidiar a un pop star. Mujeres y hombres que se desesperan por acercarse a el, entregarle un papelito, un rosario, rozar la mano por su rostro, en señal de bendición o de protección.

Y finalmente su discurso. Un discurso corto. Máximo una hora. Pero conciso, con pulpa. Y que ha mejorado cada día mas, fresco, ideas nuevas, repitiendo esas palabras que tanto le hacen falta a mi país. Progreso, futuro. Habla de políticas sociales (pero sin distinción política), de salud y sobre todo de educación. Le comentaba a mis amigos que su discurso -separando las distancias- me recordaba a Mandela, que afirmaba: "La única diferencia entre una doctora y la hija de un campesino es la educación" . También ofrece estabilidad económica, generando confianza para la inversión y el desarrollo de la industria local. 

Logrará todo lo que ofrece? Quizás no. Aquí hace falta reconstruir mucho. Pero con el hecho que logre la mitad, ya sentaría unas buenas bases para un futuro mejor. Solo les pido que al votar. Piénselo. Y pregúntese: ¿Cree Ud. que las cosas están bien como están?, ¿Podemos estar mejor?, ¿Nos merecemos más como País? En unos días sabremos cual es la respuesta del pueblo y que luchador levantará victorioso el cinturón de campeón.







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